Para nadie es un secreto que estamos atravesando un periodo de transformación digital del cual todos somos partícipes. Los nuevos hábitos de consumo han obligado a las grandes corporaciones a hacer de sus servicios una experiencia personalizada para cada uno de sus clientes y la Inteligencia Artificial (AI), es crucial en este proceso.
Hoy en día, el uso de la Inteligencia Artificial en el transporte y las entregas de Última Milla, es indiscutible, puesto que, la mayoría de las empresas, en especial los e-Commerce, hacen uso de estos datos para proporcionarle a los usuarios ofertas especiales, un remarketing eficiente o el obsequio del envío por la compra de sus productos.
Por otra parta, la AI aplicada en logística, optimiza y crear rutas inteligentes, coordinando recursos y viajes de forma más eficiente y rentable. También establece una omnicanalidad dentro de la compañía, automatiza y acelera los procesos de producción y almacenamiento y genera un análisis predictivo en el mercado.
Indudablemente, la tecnología está transformando la forma de ver el mundo, entre más fácil y práctico sea el proceso, mayor será la rentabilidad para el negocio. Claro está, que, en un principio, se deberá hacer una inversión acorde a lo que la compañía desea a mediano o largo plazo, pero los resultados estarán asegurados bajo una predicción de la Inteligencia Artificial, así que, solo queda decidir si el futuro es ahora.